Coronavirus: Habilitan espacios de uso común en viviendas con un protocolo específico
Muchas de las áreas de uso común de los edificios, condominios y barrios cerrados de la Ciudad y del Gran Buenos Aires, que estaban clausuradas desde que en marzo comenzó la cuarentena ante la llegada del Covid-19, podrían ser utilizados a partir de este mes como parte de los cambios y las autorizaciones en una nueva etapa de la reapertura y flexibilización de la cuarentena. Parrillas, quinchos, canchas de tenis, parques, lavandería y otros espacios de uso común quedarían habilitados para los inquilinos y propietarios de dichas unidades funcionales.
Sin embargo, para acceder a cada una de esas zonas se debe respetar un protocolo específico que fue consensuado con el Sindicato Único de Trabajadores de Edificios de Renta y Horizontal (Suterh) y distintas áreas de Gobierno que participaron de su elaboración. Las personas que integran los grupos de riesgo no estarán autorizados a usar estos lugares debido a que presentan mayor vulnerabilidad ante un eventual contagio de coronavirus. Además el cumplimiento de cada medida preventiva deberá ser responsabilidad del consorcio, la administración y, sobre todo, la conciencia social de las personas, ya que se trata de ámbitos privados.
Cada sector tendrá medidas específicas, pero las normas básicas y obligatorias de cuidado para evitar los contagios en todas las áreas comunes son el uso obligatorio del tapabocas, el mantenimiento de la distancia social de 1,5 metros dentro de las instalaciones y la limpieza y desinfección de las superficies entre cada uso. También se estableció que solo podrán utilizarse los sectores que permitan ser ventilados.
El detalle de uso de cada espacio común
En las parrillas, por ejemplo, se pedirá la presencia de una sola persona a cargo de asado para que luego lleve los alimentos a la vivienda. Si el edificio cuenta con un quincho, podrán hacer uso de las instalaciones los cohabitantes de una misma unidad funcional, pero no recibir visitas de no residentes o de otras familias del mismo edificio. Al terminar cada usuario será responsable de desinfectar las superficies de las mesadas y bordes de parrilla con lavandina, alcohol o soluciones sanitizantes.
Para el uso de parques, correderas y terrazas se deberá respetar el ingreso de una persona cada 15 metros cuadrados y cada consorcio tendrá que establecer la cantidad máxima que pueden acceder en simultáneo a cada uno de estos espacios con turnos previos y un máximo de 45 minutos por persona.
En el caso de los lavaderos o laundrys de uso común, la prendas deben ingresar en bolsas y no tendrán que ser sacudidas ni tocar otros elementos de la lavandería. En caso de hacerlo, habrá que desinfectar las superficies. Cuando finalice el lavado, se recomienda higienizarse las manos antes de retirar la ropa limpia.
Barrios cerrados también adhieren
Cada vez son más los barrios cerrados ubicados en GBA que también estarían reabriendo y habilitando por fin el uso de sus espacios comunes, aunque con indicaciones que se ajustan al protocolo Covid19. Placitas de juegos, canchas de fútbol, tenis y muelles, entre otros, con carteles exigiendo el uso obligatorio de tapabocas y la distancia social sugerida. En Villanueva, por ejemplo, un complejo de barrios náuticos ubicado en Benavidez, en la localidad de Tigre, habilitaron espacios comunes para que los chicos puedan jugar, nadar y pescar, aunque con estrictas normas de distanciamiento.
Conciencia social y respeto por el otro
De eso se trata, en realidad. Aunque habilitemos espacios comunes, la responsabilidad sigue siendo social. Es complejo evitar que niños jueguen sin tocarse o estar demasiado cerca, es complejo dimensionar un verano inminente usando un barbijo. Aun así, y aún habilitando espacios comunes que fueron clausurados por casi 9 meses, autoridades gubernamentales y administrativas de consorcios animan a la sociedad a no olvidar algo importantísimo: el cambio es cultural. La modificación de ciertos hábitos que pueden prevenir y cuidarnos a todos no dependen del Estado o de un consorcio: depende de todos y cada uno de nosotros, de respetar al otro, de cuidarlo. De mantener distancia, de lavarse las manos, de usar alcohol en gel, de evitar compartir un mate con alguien desconocido, de salir si tenés fiebre o te sentís mal.
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